Me llegó este mensaje del SEÑOR: «¿Qué ves, Jeremías?» Yo respondí: «Veo una rama de almendro». 12 El SEÑOR me dijo: «Has visto bien, porque estaré pendiente[b] de que se cumpla todo lo que te digo en mi mensaje». 13 Me llegó por segunda vez mensaje del SEÑOR, diciendo: «¿Qué ves, Jeremías?» Yo respondí: «Veo una olla rebosante de agua hirviendo que se derrama desde el norte». Jeremías 1:11-13 PDT La manera en la que nosotros mismos nos vemos y la manera en la que vemos nuestro porvenir, es de suma importancia para el cumplimiento de nuestro propósito en Dios, y aunque a menudo podemos perder la esperanza o pensar que ya todo acabó, Dios aún solo está empezando con nosotros, por ello es importante cerrar nuestros ojos a lo natural y empezar a ver las cosas con una óptica divina.
de lo que vemos va a depender el cumplimiento de su obra en nosotros
Ahora bien, fe es la realidad de lo que esperamos. Es la prueba palpable de lo que no podemos ver. Hebreos 11:1 La palabra de Dios cuestiona lo que estamos viendo porque de ello puede depender lo que viene para nuestras vidas, y la pregunta a Jeremías ¿Qué ves?, debe replicar en nuestro corazón hoy, pues de lo que vemos va a depender el cumplimiento de su obra en nosotros, el desafío es a ver la vida de manera que Dios nos ve, y Él nos ve ascendiendo de gloria en gloria.
11 Porque yo sé los pensamientos que tengo acerca de vosotros, dice Jehová, pensamientos de paz, y no de mal, para daros el fin que esperáis. Jeremias 29:11 PDT La óptica perfecta de nosotros la tiene el Señor, Él ya nos vio donde nosotros aún no, y para ver cómo Él ve, lo que debemos hacer es creer, y caminar en Fe, cerrar nuestros ojos a la realidad presente y vivir intencionalmente creyendo con fe que lo mejor está por venir, lo cual nos debe conducir a llevar una vida donde no nos conformamos porque siempre hay más, y el plan de bien de parte de Dios para nuestras vidas no se acabará.
Abre mis ojos y miraré las maravillas de tu Ley. Salmos 119:18 RVR
Solo a través de la fe podremos ver lo que Dios tiene para nosotros, y entonces sus maravillas serán palpables, podremos alcanzar el cumplimiento de sus promesas una vez que las visualicemos en lo espiritual, pues mantener nuestra mirada en Él nos enfoca en su propósito eterno y en sus bendiciones.
Las cosas secretas pertenecen a Jehová nuestro Dios; mas las reveladas son para nosotros y para nuestros hijos para siempre, para que cumplamos todas las palabras de esta ley. Deuteronomio 29:29 RVR1960 Dios no solo quiere que nosotros abramos los ojos a sus planes de bien que vienen para nuestra vida hoy, la promesa de Él es que va a trascender por nuestras generaciones.
CONCLUSIÓN: 18 Pido que Dios les abra la mente para que vean y sepan lo que él tiene preparado para la gente que ha llamado. Entonces podrán participar de las ricas y abundantes bendiciones que él ha prometido a su pueblo santo. Efesios 1:18 RVR1960 La visión de nuestros sueños nos llevará a su cumplimiento, una vez que estos estén en nuestra mente podremos enfocarnos en ellos para alcanzarlos, y Su Palabra nos propone que abandonemos la manera pesimista de ver el futuro y empecemos a visualizar sus promesas para verlas cumplidas en nuestra vida, pero esto inicia cuando renunciamos a la manera natural de ver las cosas y empezamos a verlas desde una óptica divina.
Optica Divina
Un conquistador nace cuando se rehúsa a renunciar o a rendirse, para llegar a tener un carácter de conquistador uno debe enfrentarse a diversas pruebas y saber sobrellevarlas a manera de dominarlas para ser superior a ellas, Dios se complacía en presentar a aquel que sobrellevo toda prueba en la cruz diciendo "Este es mi hijo amado en quien tengo complacencia", nuestro desafío está en vivir de manera que cuando Dios nos presente se complazca en hacerlo, de manera que
Espiritu De Conquista
Un conquistador nace cuando se rehúsa a renunciar o a rendirse, para llegar a tener un carácter de conquistador uno debe enfrentarse a diversas pruebas y saber sobrellevarlas a manera de dominarlas para ser superior a ellas, Dios se complacía en presentar a aquel que sobrellevo toda prueba en la cruz diciendo "Este es mi hijo amado en quien tengo complacencia", nuestro desafío está en vivir de manera que cuando Dios nos presente se complazca en hacerlo, de manera que